Decoradas en una paleta de tonos blancos la decoración en estas habitaciones es sobria y claramente inspirada en la filosofía Zen. El toque de color lo aportan los alegres cuadros y elementos decorativos inspirados en el pop art que dan a la estancia un aire juvenil y divertido.
El punto de atención en la habitación se centra en la cama, elevada en un sobrepiso, que ayuda a diferenciar las zonas de descanso y de entretenimiento.
El hall de entrada cuenta con un amplio salón, que puede albergar a 6 personas cómodamente, con sofás personalizados, conexión WIFI a internet y un sstema de entretenimiento compuesto por TV de 32″, reproductor de DVD, Sound Dock, y un minibar ampliamente surtido.